Muchas personas comen alimentos condimentados, con bastantes conservantes artificiales, pero el uso excesivo de condimentos afecta la salud.
Los condimentos de por si no son malos, “la clave” esta en la moderación; es decir, en consumirlos en muy pequeña cantidad.
Los condimentos como el vinagre, limón, huacatay, muña, etc., dan sazón a la comida, la hacen más apetecible y sabrosa. Y las especias como pimienta, comino, ajo, ají, canela, vainilla, clavo de olor, orégano, romero, anís, perejil y otras hierbas aromáticas dan sabor, mejor aroma y color.
En caso de gastritis, ulcera péptica u otro cuadro digestivo, los condimentos deben eliminarse por completo de la dieta ya que irritan la mucosa gástrica.
Sin embargo, en cantidades moderadas ofrecen sustancias antioxidantes y bactericidas, minerales, ácidos grasos insaturados y otras que estimulan el apetito. El clavo de olor y el laurel ayudan a reducir los gases y la hinchazón abdominal.
El ajo baja un poco el colesterol malo, los pacientes hipertensos, de insuficiencia cardiaca o renal, no deben consumir sal, pero pueden usar condimentos.
Sabías que…
En exceso, la pimienta negra, vinagre, laurel, etc., irritan la mucosa gástrica, dan nauseas y vómitos. Evite condimentos “a granel”, pueden estar condimentados. Consuma al natural o envasado con registro de DIGESA, buen olor y sin grumos.
fuente:peru salud
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